DÍA 8 DE CAMPAMENTO (23 DE JULIO)
¡Nuestra última crónica!, queremos compartir con vosotros el cierre de este increíble campamento.
El día estuvo marcado por el juego libre, donde todos tuvimos la oportunidad de relajarnos y disfrutar sin la presión de un horario estricto.
La anécdota más destacable del día sucedió cuando decidimos aprovechar el tiempo libre para probar una máquina del camping llena de juguetes. Había que mover un gancho para intentar cogerlos, y para las personas con discapacidad visual, esto fue un gran reto. Sin embargo, la sorpresa de no saber cuál sería el premio hasta tocarlo y reconocerlo fue muy entretenida para todos.
Por la mañana, teníamos planeado practicar esgrima adaptada, pero por motivos de fuerza mayor, ajenos a la organización del campamento y a la ONCE, no pudimos conocer este deporte. Fue una pena, ya que muchos estaban entusiasmados por probarlo. Sin embargo, esto nos permitió tener un momento de distensión muy necesario. Recogimos las habitaciones con calma y nos dirigimos al parque del camping, junto a la cafetería, para disfrutar de un rato de juego libre.
Algunos se entretuvieron con juegos de mesa, otros disfrutaron de los columpios, y muchos aprovecharon para pasar tiempo con los amigos y amigas del campamento. También aprovechamos para completar las encuestas de satisfacción, una actividad importante para nosotros para seguir mejorando en futuras ediciones.
Después de comer, a las 16:00, los autobuses llegaron para llevarnos de vuelta a casa. Aunque fue triste despedirnos de nuestros nuevos amigos y amigas, nos llevamos muchos recuerdos y experiencias inolvidables.
En nombre del equipo de monitores y monitoras, puedo decir que vivimos muchos momentos especiales donde siempre reinó el compañerismo y una competitividad muy sana entre equipos y el Jefe de Campamento, quiere agradeceros vuestra asistencia y participación en todas las actividades. ¡Espero que hayáis disfrutado esta experiencia tanto como nosotros!
Para terminar con nuestra última crónica, no nos puede faltar nuestra clásica entrevista del día. Hoy entrevistamos a Unai, de 13 años. Nos contó que se lo pasó muy bien en el campamento, disfrutando mucho de las actividades, los monitores y la comida. Su actividad favorita fue la velada en la que teníamos que descubrir quién robó la antorcha olímpica (el Cluedo). Unai también nos dijo que le encantaría volver el año que viene, si le dejan sus padres, y nos confesó que le gustó mucho el buzón del campamento. Escribió muchas cartas para todos, para que las recibieran de sorpresa.
Hoy, nos despedimos con una sensación agridulce, por la alegría de volver a casa con nuestra familia, pero a la vez, la tristeza de tener que despedirnos de nuestros nuevos amigos y amigas. ¡Hasta el próximo campamento!